30 noviembre, 2005

Traducción libre


Jelou! Mai neim is isterica. Aim beri japi bicos ai am in niu llorc.
Más o menos es lo que sabía decir yo en inglés. Tal cual. Por cierto, pronunciando las jotas como si tuviera que quitarme algo de la garganta. Vamos, que no tengo ni idea. Mi grupo de palabras en inglés se reduce a: If, end, while, do, loop, next, begin, then,else...
¿Os suenan de algo? Jejejeje!
Bueno, mi querida hermana se fue a vivir un añito y pico a New York y yo no había salido en mi vida de España. Así que ese verano, decidí ir para allí aprovechando que ella estaba. Para empezar, me equivoqué y le dije que iba un día antes. Mi hermana se pidió vacaciones ese día y tan feliz me vino a buscar al J.F.K. Claro, yo no salía, no salía y no salía. Así que preguntó por mí en el aeropuerto. Respuesta obtenida: “A partir del 11 de septiembre y por motivos de seguridad, no se puede facilitar ningún dato sobre los pasajeros de los vuelos”. Bueno, terminó desesperada y llorando, porque creía que me había perdido, ya que no volaba directo, pasaba primero por Amsterdam. Jejeje, la sorpresa fue cuando llamó a mi casa y le dijeron mis padres, que no, que iba al día siguiente. Sé que si me pilla en ese instante me hubiese matado. Al final me tuvo que venir a buscar su novio por aquel entonces. Él era polaco y sabía, pues eso, polaco e inglés pero, de español nada de nada. Ahora que con lo que hablo yo (por los codos), la poca vergüenza que tengo y mi super diccionario de bolsillo, pude entablar una especie de conversación. Digo especie porque yo entendía las cosas a medias. En el viaje del aeropuerto a su casa (Brooklin, 2 horas de viajecito) me contó que “las mujeres jueces se rapan la cabeza cuando se casan”. Yo flipé en colores. No pensaba que las culturas fuesen tan diferentes. Cuando conseguí a mi traductora particular (mi tata), me enteré de que en realidad eran las judías ortodoxas, no las jueces.
Otra de las conversaciones que mantuve con un compañero de piso de ella (también polaco) fue la siguiente:
Yo - Perdona pero, no te aguanto
Él – Ah! Te lo repito, si no me aguantas.Las frases anteriores hay que sustituir “aguantar” por “entender”. Los dos hablábamos muy mal inglés. Pero, nos pegamos conversaciones de horas y horas. Eran semi gestuales, claro. Y eran tan largas porque para decir una chorrada nos pegábamos media hora para entendernos.

29 noviembre, 2005

Érase una vez


Érase una vez en un lejano reino dos hermosas niñas que vivían con sus hermanos y sus padres en una humilde morada. Su querida madre siempre les decía que las dos eran iguales en todo junto con sus queridos hermanos. Los cuatro hermanos se adoraban y se querían muchísimo. Pero, a pesar de lo que su madre decía, ellas estaban estigmatizadas de tal manera que tenían que hacer las camas, limpiar la casa y fregar los platos desde que eran mozuelas. Al cumplir una de ellas los 16 y la otra los 15 apareció una bruja mala que les echó una maldición: “A partir de ahora si queréis que se os valore tendréis que trabajar para así aprender el valor del dinero”. Como los hermanos varones eran más pequeños creyeron que al cumplir la misma edad se les aparecería a ellos también la bruja mala. Pero, por lo visto la maldición sólo era para las mujeres de la casa, porque los hermanos se pusieron a trabajar a la edad casi de jubilarse. Tal y como la sociedad les había inculcado, creyeron que al cumplir la mayoría de edad aparecería el príncipe azul que las amaría eternamente y serían felices y comerían perdices. Y pasaron los años y un montón de príncipes azules (más de los que los padres les hubiese gustado, jajajaja! Y además más de los que ellos sabían.). Al llegar a una edad prudencial, dejaron de creer en semejantes moñeces, se independizaron, basaron su futuro en sí mismas. Estudiaron, tarde, pero, estudiaron y se sacaron cada una un estudio diferente que gracias a su inteligencia y a su perseverancia, lograron conseguir trabajos acorde con su preparación. Ahora son felices y comen, no perdices, sino lo que les viene en gana, y cuando ellas quieren. ¡Ah! Y ya no esperan al príncipe azul, de vez en cuando disfrutan de un revolcón con algún bardo, ya que todo el mundo sabe que son muuucho más divertidos que los príncipitos esos que se rompen de mirarlos. Y las noches de sábado se las puede ver sobre volando los tejados del casco viejo montadas en sus escobas. Jajajajajaja!

Bloggeros anónimos


¡Hola! Mi nombre es Istérica y estoy enganchada a los blogs. Sí, lo sé, he venido al mejor sitio a contarlo. Mi vida antes estaba llena de correos del notes, de yahoo y de hotmail pero, ahora de repente todo es diferente. El notes ni lo abro, lo cual es un problema porque es el correo interno de la empresa. Di que para lo que tienen que decir, sólo mencionan contrataciones de super jefes que por Zaragoza no los veremos aparecer en toda una vida. En hotmail, se me van acumulando mail tras mail, di que allí sólo me saltan las ofertas de infojobs. Y a yahoo sí que le hago levemente algo más de caso. Un día una amiga mía me comentó que su querida hermana escribía en un blog, y me dio la dirección para verlo. Al principio no entendía nada, porque contaba historias muy extrañas que debían enganchar con otras historias de otros bloggeros. Pero, de repente empezó a contar cosas del mundo real. Y, oh! Sorpresa! Me empecé a enganchar. Claro! Estoy enganchada al tabaco (lo he intentado dejar dos millones de veces), no me engancho a las drogas porque sé que si las tomo me engancharía y no me he enganchado al alcohol porque no tengo nada de aguante, que si no... Y lo malo de todo es que no tengo internet en casa, jejejeje.

28 noviembre, 2005

Dedicado

(Espero que no me odie por lo que voy a escribir)
Antes en uno de los blog’s he leído que alguien no tenía ni esperanza, ni ilusión, ni expectativas. Ya sé que me estoy metiendo en camisa de once varas pero, no puedo evitar escribir lo siguiente (Def. de la rae)
Esperanza: Estado del ánimo en el cual se nos presenta como posible lo que deseamos.
El que no tiene esperanza, ¿no cree posible nada de lo que desea?
Ilusión: Esperanza cuyo cumplimiento parece especialmente atractivo.
El que no tiene ilusión, ¿no ve atractivo nada de lo que desea?
Expectativas: Esperanza de realizar o conseguir algo.
El que no tiene expectativa, ¿no cree posible conseguir lo que desea?
Si no se tiene ni esperanza, ni ilusión, ni expectativas ¿es porque no se desea nada en esta vida?

La princesa está triste.. ¿Qué tendrá la princesa?
Los suspiros se escapan de su boca de fresa,
que ha perdido la risa, que ha perdido el color.
La princesa está pálida en su silla de oro;
está mudo el teclado de su clave sonoro,
y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor.

Ruinas de Bílbilis


A veces pienso que quizá sí que se podría generalizar en lo que a pensamientos se refiere entre los hombres y las mujeres. Es decir, que hay ocasiones en las que claramente casi todas las mujeres piensan de una manera y casi todos los hombres piensan de otra totalmente distinta. Se me ha ocurrido al acordarme de una historia que ocurrió cuando mi grupo de amigas con nuestros respectivos fuimos de excursión a ver las ruinas de Bílbilis. Cogimos los coches y fuimos hacia allí. Por supuesto para ver las ruinas, los coches los teníamos que dejar en un sitio y luego recorrernos todo a patita. Cuando ya estábamos a un buen trecho de los coches mi hermana se dio cuenta que no tenía el móvil en el bolso. Entonces pensó que o se le había olvidado en un bar donde habíamos parado a tomar algo o que se lo había dejado en el coche del novio de una de nuestras amigas. Mientras tanto los chicos se habían adelantado junto con una de la chicas y ya estaban sobre el castillo (creo que era un castillo, jejeje). Nosotras volvimos hacia el coche pero, antes a grito pelado, avisamos a los chicos desde abajo del castillo. Ellos sólo entendieron que mi hermana había perdido el móvil y luego aplicaron sus teorías. Cuando subimos nos las explicaron:
Teoría de los chicos:
- Se vuelven hacia el coche porque lo van a coger para hacer el recorrido inverso en busca del móvil.
- No, no, no, que no tienen las llaves. Se vuelven al coche para ver si alguien por el camino lleva el móvil que seguro se lo han robado.
La única fémina que estaba con ellos les dijo:
- No hombre, no. Lo más seguro es que hayan vuelto para ver si el móvil está dentro del coche. No tienen llaves para abrirlo pero, con otro móvil llamarán y verán así, si está o no dentro del coche.
Los chicos:
- Jajajaja! Pero, por favor! Qué mente más retorcida! Cómo van a ir al coche para eso! Anda por favor! Sólo una mujer podía pensar así!

Por supuesto, ella tenía razón. Y lo que nos reímos cuando volvimos y explicamos a qué habíamos ido al coche. ¡Ah! El móvil estaba dentro del coche, así que ya dejamos de preocuparnos por él y disfrutamos de las ruinas de Bílbilis.

25 noviembre, 2005

1988 Más fragmentos en la memoria

- Cariño, baja a por sal.
- Sí mamá ahora voy.
Minutos más tarde...
- Pero, si yo lo que quería era sal fina y has comprado sal gorda! Ay! Que desastre! En fin, me apañaré con esto.
Dos lágrimas primero y después... todo un mar. Pero, qué inútil soy, ni siquiera soy capaz de comprar algo tan sencillo como sal.
Cuatro horas más tarde....
- Pero, ¿qué te pasa? ¿Por qué sigues llorando? No pasa nada, sólo es sal.
- Soy un desastre, ni eso soy capaz de hacer.
- A ti te pasa algo distinto, cariño. ¿Tienes algún problema en el instituto?
Otro mar de lágrimas junto con ataque de hipo. ¿Qué me pasa? ¿Por qué me siento así? Quizás sea que desde hace un mes no me habla nadie en clase. Quizás sea que desde hace un mes toda mi clase se ríe de mí. Quizás sea que cuando paso por el pasillo me golpean en el cuello a traición y no sé quien de toda la multitud ha sido. Quizás es que cuando bajo al recreo, tengo que irme a dar vueltas sola por la calle y subo sola otra vez a clase. Quizás sea que los trabajos en grupo, tengo que hacerlos sola. O no sé, que voy muy bien en clase pero, sólo en notas, porque lo que es mi vida social está vacía. Pero, tengo que ser fuerte. Esto seguro que es una prueba que Dios ha puesto en mi vida para endurecerme el carácter.
- Tranquila cariño. Ya verás como todo se acaba. Sólo tienes que aguantar los 4 años de instituto, que verás que se pasan en nada.
Con 14 años, 4 son una eternidad.

24 noviembre, 2005

J

Así son los besos según dicen maño como las cerezas.
Que si te doy una, sale toda la cesta.
Y con las cerezas dentro de la cesta puede suceder
que si te doy una, te doy más de cien



Ala! Ahí queda eso. Que voy sobrada de besos, uno para cada uno de vosotros. SMUACK!

1996 Fragmentos en la memoria

En ese momento volvía de tomar café con una amiga del pueblo. Habíamos quedado porque ya hacía tiempo que no nos veíamos y así nos contábamos cómo nos iba. Ese día había aprovechado a ponerme falda ya que no iba a quedar con Ñ. Ya sabía que se enfadaría si me viese, que no debía ponerme falda porque no le gustaba que fuese provocando a los hombres por ahí. Pero, justo ese día me apetecía porque iba a ver a mi amiga y me apetecía que me viese guapa. Incluso, arriesgando mucho, me había pintado. Mi amiga era de estas chicas que siempre van vestidas a la última, muy elegante y muy guapa. Siempre pintada sin ser exagerada. Así que a mí me apetecía ir igual.
Al salir del café, yo me dirigí hacia clase. A Ñ, no le gustaba que estudiase porque decía que me metían ideas extrañas en la cabeza. Yo trabajaba por aquel entonces de limpiadora y siempre había sido bastante lista, así que me apetecía demostrarlo estudiando y sacando buenas notas. La verdad es que muy apoyada por él no me sentía pero, yo le quería igual.
Al fondo de la calle vi a un amigo mío de clase que estaba en la puerta esperando mientras se echaba un cigarro. Me alegré de verle y pensé echarme yo otro antes de subir a clase. De repente, me di cuenta que Ñ estaba dentro del coche esperándome en la puerta y con una cara que no demostraba mucha simpatía. Yo me alegré tremendamente de haberle visto antes porque así no saludaba a mi amigo. Claro era hombre y a Ñ no le gustaba que saludase a hombres que no fuesen mi padre o mis hermanos.
Cuando me acerqué al coche, me di cuenta que Ñ estaba realmente enfadado conmigo.
- ¿Cuánto tiempo has estado tomando café con S?
- Media hora, sólo media hora.
- El café se sirve y se toma, son 5 minutos. No sé que narices ha hecho durante media hora. Que sepas que no me gusta que estés tanto rato con tus amiguitas.
- Pero, así hablábamos de nuestras cosas.
- Está bien, la próxima vez iré yo para ver de qué habláis tanto rato.
- Vale, lo siento. Será la última vez.
- Por cierto, ¿cómo te atreves a ir a clase con falda? Claro, como hoy no quedabas conmigo... Te crees que soy tonto. Te la has puesto para que te vean los chicos de tu clase.
- No, perdona. Será la última vez de verdad.
- Está bien, no me quiero enfadar contigo pero, muéstrame un poco de respeto. No vuelvas a ponerte falda si no es para ir conmigo.
- Bueno, que subo a clase que llego tarde.
- Espera, todavía no han encendido la luz de tu aula.
- Pero, es que la que la enciende es la profesora cuando entra a clase. Y si subo cuando ya esté encendida, llegaré tarde.
- Me da lo mismo. No tienes nada que hacer en los pasillos esperando a que llegue la profesora. Espérate que bastante contento me tienes ya.
- Vale. Lo siento.

23 noviembre, 2005

La abuela tacatá


Hace ya un año y pico que entré en la empresa en la que estoy actualmente. Más o menos desde que volví de Barcelona. En todo ese tiempo conforme iba conociendo a mis compañeras les he ido contando historietas. Todas las historietas que me han ido sucediendo a lo largo de la vida. En Barna, mi antigua compañera de piso me ha dicho alguna vez que me tendría que meter de contadora de cuentos, porque cuando estoy contando las historias, me meto dentro de ellas y las vuelvo a vivir. Todo esto va porque aquí, en el trabajo, ya me autodenomino la abuela tacatá (tacatá sería mi apellido pero, como que no lo voy a poner, jejeje!). A cada cosa que cuenta alguien, me acuerdo de una anécdota que pega totalmente. Y claro, al principio aún puede resultar graciosas mis historietas pero, es que como he dicho al principio, ya llevo año y pico aquí. Así que en estos momentos ya empiezo a repetirme, como el ajo. Aunque le ponga todo mi énfasis en contar la misma cosa, no deja de ser exactamente lo mismo. Es más, creo que escribo aquí para que alguien me aguante las chorradas que cuento. Jejejeje! Mi abuelo Joaquín (precioso nombre donde los haya) siempre nos contaba historias repetidas y nosotros siempre íbamos a preguntarle: “Yayoooo, ¿cómo era esa historia que....?” Y recuerdo que me encantaba. Mi abuelo era rubio de ojos azules, así que al menos he sacado sus ganas de contar historias (bueno, y su color blanco lechoso).

22 noviembre, 2005

¡Qué vergüenza!

No sé por qué he empezado a acordarme de los días más avergonzantes en mi vida. Bueno, mucha vergüenza no suelo pasar porque estoy acostumbrada a hacer el ridículo y para mí ya no desea que me trague la tierra. Los más traumáticos siempre han sido en la típica edad del pavo. Uno de ellos recuerdo perfectamente en 2º de bup, creo, o en 3º, ya no me acuerdo bien. Todo el mundo estaba entrando al instituto por un hueco que había en la verja. Ese día era pleno invierno y los charcos se habían congelado. Yo iba toda contenta vestidita de arriba a abajo de blanco. Un jersey blanco y unos vaqueros blancos. Ahora que lo pienso con lo morenaza que soy yo de piel debía parecer un vaso de leche. Bueno, para poder entrar por el hueco de la verja, íbamos todos en fila india y justo delante había un charco totalmente congelado que todo el mundo saltaba sin ninguna dificultad. Cuando me tocó el turno a mí, por supuesto fui a saltarlo con tan buena suerte que me resbalé y caí de bruces sobre el charco. El charco dejó de estar congelado, claro, porque yo rompí toooooodo el hielo. Así que tuve que volverme a casa para cambiarme. Llegué tarde a clase y al asomar mi cara por la puerta, me vio la profesora (era la de Historia, lo recuerdo perfectamente) y no pudo evitarlo y sin decirle yo nada, se echó a reír, seguida de todos mis compañeros. La mujer estaba hasta llorando de la risa a la vez que pedía perdón. ¡Bueno, ni que ella no se hubiese caído nunca! Evidentemente, ella era una de las personas que me habían visto caerme. La verdad es que me vio todo el instituto. ¡Qué suerte la mía! Y colorín, colorado....

21 noviembre, 2005

Bocas


Hay bocas que besan, hay bocas que muerden,
bocas que alientan, bocas que atormentan, bocas indecentes
Hay bocas cobardes, hay bocas valientes,
Hay bocas frías, bocas vacías, bocas ardientes
Hay bocas cantoras que dicen canciones.
Y otras que escupen mentiras
Y otras que paran cañones
Hay bocas que gritan, que callan, que ríen, que penan
Bocas que condenan, bocas que hablan y echan fuego por la boca
Bocas siamesas, bocas traviesas que se enredan en la noche y se derraman bajo la ropa

Y en este rompecabezas de vida, que no daría,
por encontrar esa boca que encaje con ésta mía.

Hay bocas saciadas, hay bocas sedientas,
Bocas selladas, pisoteadas, bocas hambrientas,
Hay bocas culpables, bocas inocentes,
Bocas rabiosas y poderosas, bocas dementes,
Hay bocas que venden al diablo su boca
Y santas bocas que nunca han disfrutado otras bocas.
Hay bocas que tragan que escupen que hieren que queman
Bocas que envenenan, bocas que hacen suyos versos de otras bocas.
Bocas suicidas, bocas lascivas, bocas que cobran sus besos malviviendo de boca en boca.

Y en este mundo de prosa, farándula y poesía, yo quiero encontrar la boca que rime con esta mía.

Del viernes al domingo

Estoy cansada, tengo los ojos medio pegados y me duele el estómago. Creo que se debe al día que está haciendo. Si miro por la ventana que tengo a mano izquierda, veo el edificio del Provincial medio desconchado y por encima del tejado veo las nubes que cubren el cielo entero. Es un día de relax. Creo que si me midieran la tensión ahora verían que la tengo bajísima. Y lo que recuerdo ahora es a mis amigas de mi ciudad adoptiva. Y de lo guapas que estaban todas. Y de las ganas que tenía de verlas. La verdad es que ha sido como si no hubiese pasado nada de tiempo. Hace medio año que no las veía pero, ha sido como si las viera todas las semanas. Sólo espero que me devuelvan la visita.

18 noviembre, 2005

Vaciando el cerebro





Lunes- Descanso semanal (igual voy a correr)
Martes-Nadar
Miércoles-Jota
Jueves-Bailes de salón y Correr
Viernes, Sábado y Domingo- Es fin de semana, salir y pasarlo bien.

Bueno, ya que mi vida está vacía, la llenaré de actividades extra. ¡Ah! Y por supuesto voy a empezar a gastarme el sueldo íntegro en ropa, que no tengo ganas de ser profunda.

17 noviembre, 2005

Miedos


Alguna vez he comentado que estuve viviendo en Barcelona. Bueno, he pensado en ella porque últimamente ha habido algunas historietas por los blogs sobre Zaragoza y sobre viajes a Barna. Hace un año y pico ya, que me volví de allí. La verdad es que fueron 3 años y pico estresantes y maravillosos. Sí, ya sé que no pega mucho los dos adjetivos pero, es como fue para mí. Estresantes fueron por la cantidad de trabajo que tenía, parecía que trabajara en Florín Corporation. Maravillosos fueron porque por fin me emancipaba, porque salía de mi ciudad, porque hice un montón de amigos y me lo pasé fenomenal. Después de volverme a Zaragoza, he vuelto alguna vez pero, ya hace bastante que no iba. Este fin de semana voy para allí. Ya empiezo a notar los nervios en el estómago. Es como si yo tuviese 10 años y me fuese de excursión con el colegio. He quedado con mi ex compañera de piso. Ni siquiera he avisado a mis amigas de siempre. Estos nervios que estoy haciendo, en realidad son porque tengo miedo a llegar. Tengo miedo, porque lo que yo guardo es un muy buen recuerdo y sé que ya nada es como antes. La ciudad es la misma pero, ahora la extraña soy yo. Todas las veces que he ido me ha pasado lo mismo. Y lo malo no es antes, es justo cuando el autobús baja por la calle Numancia. Entonces sólo tengo ganas de decir:”Por favor, dé la media vuelta y volvamos a Zaragoza”. Menos mal que soy una persona adulta y aunque tenga peores miedos que un niño, la vergüenza me hace callármelos.

16 noviembre, 2005

Mi primera vez

Veo que se ha puesto de moda hablar del trabajo. Actualmente mi trabajo es normal y corriente, se parece a muchos de los que habéis contado así que no hablaré de él. Os contaré otra historia.
Yo estudiar, he estudiado año sí, año no. Así que a mitad de industriales dejé de estudiar y me puse a trabajar. Esto también vino incentivado por la falta absoluta de recursos económicos de mis padres. Ya trabajando y como me aburría (estaba de limpiadora entre semana y camarera los fines de semana) me puse a estudiar informática (qué raro ¿eh?). Sólo estudiaba por sentirme bien conmigo misma, no porque creyera que terminaría trabajando de eso, de hecho me veía muy vieja para cambiar de trabajo (jajajaja, tenía 22 añitos). Un día una compañera mía me comentó que tenía a demasiada gente para darles clase de matemáticas y que ella no daba abasto. Me preguntó que si me interesaría porque a mí siempre me han gustado mucho las matemáticas y se me dan bien. Por supuesto acepté. Así que me presenté un día en la esquina de una calle y me vino a buscar. Era una chica de instituto, normal, como cualquier otra. Subimos a su casa y comencé a explicarle todas las dudas que le iban surgiendo de los ejercicios que tenía que hacer. Al finalizar la clase, me pagó. Y yo, yo, ¡yo me sentí como si estuviera atracando! Me daba una vergüenza horrorosa cobrar por algo que me había encantado. ¡Es como si vas a Disneyland y cuando sales por la puerta, cogen y te pagan! ¡Aisssshhh! Fue la primera vez que cobraba por trabajar en algo que me gustaba. Bueno, a partir de entonces le cogí el gusanillo a trabajar y disfrutar a la vez. No creí que se pudiera hacer. ¡Ah, por cierto! Aprobó los exámenes de matemáticas.

15 noviembre, 2005

Cómo me gusta ser mujer

chiu chiu, chiu chiu, chiu chiu! ¿A qué huelen las nubes? Yo os digo a qué huelen las nubes: A dolor de ovarios. Bueno, a dolor de ovarios, a dolor de piernas, a dolor de espalda, a hinchazón de todo el cuerpo! Pero, si esta mañana no me he podido mirar en el espejo! ¿Por qué? Porque llevaba los ojos tan hinchados que no los podía abrir. Ah! Y por supuesto me he tenido que poner la ropa más ancha que he encontrado para poder moverme. Aún así al subir al autobús me han cedido el asiento: “Señora, que no estoy embarazada! La tripa esta enooooorme que tengo es de otra cosa”. Sí, es que me encanta ser mujer y encontrarme en esos días en los cuales no me puedo mover mucho, por si acaso. Y por supuesto, si me veis por la calle y no os dirijo la palabra es lo mejor que os puede pasar, porque además tengo cambio de humor radical. En los días anteriores estoy muy deprimida y en mitad estoy de un mal genio que no hay quien me respire encima. ¡En fin! La mujer globo se despide ¿orgullosa? de ser mujer.

14 noviembre, 2005

Mis pijamas

A continuación os muestro los pijamas que me gustaría tener. Uno para cada día de la semana. El del lunes lo podría repetir para siempre:
Lunes - Carmelo Gómez
Martes - Michael Madsen
Miércoles - Sergi López
Jueves - John Corbet
Viernes - Miguel Bosé
Sábado - Juan Diego Botto
Domingo - Robbie Williams

10 noviembre, 2005

Por fin es viernes

¡Por fin es viernes! ¡Ay qué bien! No sé que es lo que tiene que me anima un montón. Bueno, si me vierais la cara os asustariais. Los viernes me levanto una hora antes que el resto de la semana, y claro, llevo unas ojeras hasta los pies. Bueno, sí que sé que tiene el viernes. Que no trabajo por la tarde y que ya estamos en pleno fin de semana. No es que me moleste trabajar, en realidad (esto me da vergüenza) me gusta trabajar. Yo creo que siempre me ha gustado. Incluso cuando he trabajado de otras cosas. Bueno, señores que ustedes lo pasen bien, porque yo dejo de escribir hasta el comienzo de la semana que viene. Divertíos, amaos, disfrutad y aprovechad cada momento. ¡Un beso!

Mister X

Mientras veía ayer por la noche la televisión recibí el siguiente mensaje al móvil:
“Ummm! Qué bueno! Que aproveche. Muchos besos cariño. Te quiero”.
Evidentemente no era para mí. De hecho el teléfono que me lo envió sólo me venía como un número, no con el nombre del contacto. Lástima de esta memoria tan maravillosa que tengo, que aunque borre contactos de la agenda, sigo recordándolos. ¿Que quien era? Fácil, era X. Por supuesto, X no tenía la intención de mandarme el mensaje a mí, se lo iba a enviar a su nueva novia, claro. Pero, cosas del subconsciente o de haber estado 6 años conmigo, que al final terminó enviándomelo a mí. Claro, con ella lleva 6 meses de los cuales 3 solapados conmigo. ¿Y eso? Bueno, eso es la historia de X que se fue a vivir conmigo mientras mantenía otra relación paralela. Menos mal que ella me llamó al trabajo para comentarme su existencia, porque si no todavía estaría engañada. ¡Y eso que yo me creo muy espabilada! Siempre creí que si a mí me pasaba algo así, enseguida me enteraría. Ja, ja y más ja.
¡Ah! Y cómo terminó lo del mensaje. Fácil: Me volvió a enviar un mensaje de que sentía haberse equivocado. Yo le mandé otro de que yo no me podía equivocar porque lo había borrado de la memoria del móvil y que hiciera el favor de hacer lo mismo. ¡En fin! Que mi pasado me persigue de vez en cuando para abofetearme. Menos mal que soy como un tentempié de esos de los niños pequeños, por mucho que me golpeen siempre termino de pie.

09 noviembre, 2005

La fiesta del pijama

Ayer quedamos unas compañeras de trabajo en casa de una de ellas, para tomarnos unas pizzas y beber unas cervecitas relajantes. Por supuesto no lo comentamos con todo el mundo ni lo publicamos en el tablón de anuncios de la empresa, sólo faltaría. Claro que al salir, todos nos vieron salir juntitas. Como las cervecitas relajantes en mi tienen unos efectos doblemente perjudiciales (se ve que soy un poco floja) me quedé a dormir en casa de la anfitriona, porque supuse que sería incapaz de encontrar la puerta de mi casa. Bueno, pues esta mañana viniendo a trabajar por el extremo contrario de la ciudad al cual estoy acostumbrada a ir, me he encontrado con otra compañera (una que no sabía nada).

Ella- "¡Anda! Llevas bolsa, y eso? " (la bolsa con el pijama y la ropa del día anterior)

Yo- "Sí, ya ves, a que es chula" (quiebro descarado)

Ella- "Cómo es que vienes por aquí?"

Yo- (si sigue preguntando la extrangulo) " Nada que me he acercado a una tienda a ver si estaba abierta"

Menos mal que no he hecho nada malo que si no.... Ya sé que no puedo atracar bancos ni nada por el estilo porque me pillan seguro!

08 noviembre, 2005

Agradecimientos

Gracias a todos los que me habéis ayudado. Para vuestra información he tenido ya una conversación vía sms y seguramente quedaremos (o eso es lo que me ha dicho el milonguero). Lo que no quiero es ir de rebotada y de mala leche, sino a disfrutar cada momento y sacarle jugo. Además que como tampoco me prometió amor eterno (me hubiese meado de la risa), tampoco voy a ir exigiendo lo que yo no voy a dar. Eso sí, el chico es un encanto así que en la siguiente cita nada de sexo (a ver si soy capaz), a ver si la historia tiene algo de argumento. Aunque tampoco me viene mal el haber tenido un rollete. Después de todo lo acaecido últimamente en realidad es lo que tendría que buscar. Al fin y al cabo sólo han pasado 2 meses y 2 semanas después de X.

07 noviembre, 2005

El Milonguero

Tras pensar un poquito he llegado a la conclusión de que necesito un libro de instrucciones. Antes todo me parecía bastante sencillo. Bueno, cuando tenía unos pocos menos años. Ligaba con un chico, hablábamos y después de liarnos, siempre querían quedar conmigo para tener algo más. Y cuando digo siempre es un 95% de los casos. No sé, quizá desprendiera algo, unas feromonas que les hacían pensar que sería buena como pareja. Hace un mes conocí a un Milonguero. Este adjetivo me lo dijo mi mejor amiga. Milonguero, dícese del chico que habla contigo de forma encantadora y que te hace pensar por lo que cuenta que quiere que haya algo más que un simple lío, pero que sólo quiere sexo. A ver, no sé si hubiese tenido sexo con él si hubiese venido con la directa puesta, pero creo que sí, porque últimamente estaba un tanto necesitada. Resulta que nos pegamos 2 días hablando y besándonos. Fue maravilloso porque lo que yo quería eran abrazos fuertes y que me mimaran. Y lo tuve. Eso es de agradecer. Lo malo es a la hora de despertarse al día siguiente de acostarnos que de repente se vistió y se fue. Me quedé perpleja y hundida. Claro, que el alcohol del día anterior también hace estragos, porque es depresivo. Siempre le intento dar una explicación científica a todo. Encima, como estaba pre reglosa me quedé triste. Muy triste. También porque hace 2 meses que me había ocurrido lo de X, claro. Di que yo encuentro fuerzas de la nada porque soy de hierro.
Bueno, ayer alguien me mandó un mensaje. Yo creía que era una chica por la forma del lenguaje, y hoy he llamado por teléfono para averiguar quien era. Sorpresa! Era el Milonguero. Me he quedado de piedra. He mantenido una conversación estúpida por teléfono. Todo el rato riéndome de forma nerviosa y sin saber qué decir. Encima le he tenido que decir que no sabía quien era porque me había borrado su número. No pretenderá que me lo guarde años y años! En fin! He pedido consejo por ahí. Me han dicho que tengo que aplicar leyes básicas a los hombres. Que la explicación más sencilla siempre es la más correcta, y que los hombres piensan pues eso, con la punta la polla. Así que aplicando estas sencillas leyes tengo que pensar que el Milonguero quiere marcha. Pues a mí me pareció encantador cuando hablé con él hace un mes. Y encima iba con unos prejuicios fuertemente marcados pensando que iba a ser medio idiota y no. Resulta que tiene muy buena conversación y hablar y estar con él resulta muy sencillo, ahora pensar qué tiene en la cabeza es más complicado. Será mejor que no piense. AGGGGG!!!! Necesito ayuda!!!!! Me empiezo a parecer a Bridget Jones! Treintona, soltera, neurótica y encima fumo y peso lo mismo que ella.

4 grados

Zaragoza, 7 de Noviembre y 4 grados en la calle. Esto no sería malo si no fuese por la brisa mañanera, y la verdad es que podría ser mucho peor si soplara de verdad el cierzo. He salido esta mañana como cualquier otra para ir al trabajo, pero claro, en mi casa hace calorcillo. Ya llevan una semanita o así que han encendido la calefacción central. Y al salir a la calle mi cabeza se ha congelado de repente. Claro, como todavía no es invierno no voy a salir a la calle con gorro y abrigo, noooooo. Por Dios! Antes me congelo de frío que llevar algo adecuado a la temperatura de la calle. Ah! Y menos mal que llevo el pelo que me tapa las orejas, porque si no hubiese sido peor.
Bueno, creo que 4 graditos de temperatura ya es suficiente para poder ponerme el abrigo. Porque el resto de la gente por la calle ha pensado como yo. Iban todos con cazadoras vaqueras, prenda que todo el mundo sabe, abriga un montón. Todos los esquimales y la gente que sube a alta montaña es la prenda que utilizan. Jajajaja! Vamos! Que 2 días más así y ya veré como empieza a cambiar no sólo mi vestuario, sino también el de los demás.